Diario de grafito

La gran desgracia es aburrirse, Mateo lo sabía bien. Afilaba sus lápices sombreando con la punta de lado las hojas. Descubría palabras escritas anteriormente. Mateo se preguntaba, dónde coño habían ido, por qué sus voces se habían enmudecido.
Dicen que Mateo no se quiere, que Mateo no se valora. Mateo se pregunta qué es el valor, si se mide o se pesa. Rompe la primera punta.
Había escuchado noticias en la radio, de todo pasaba en el mundo.



El ser como individuo tiene poco que decir, egolatría y autoayuda.
No entienden que Mateo es consiciente de su característica particulistica de subelemento atómico en el Universo.

Mateo sabe, Mateo piensa. Y no por eso se menosprecia. Opina que esta muy bien que no le quieran, las puntas se gastan, y antes, a veces, Mateo las quiebra. Y sigue leyendo pasado enredador, en sombra de grafito. Y palabras superpuestas, lo más parecido y palpable a realidades paralelas.



Mateo no quita razón a los que no le quieren.
Un mudo que debería hablar no hace gracia.
Un sordo que puede escuchar es odioso.

Mateo solo entiende de minas y grises, de su hoja y sus antiguas muescas de escritura.
A Mateo vinieron médicos a quitarle el alma triste, sin pensar que era la única que tenía. Y así le dejaron, autómata. Sin poder escribir ya más.

Ahora Mateo no piensa en cosas felices, tampoco en suicidios ni maldiciones. No se pregunta qué será mañana, ni que es ahora.
Mateo sólo rompe puntas de grafito, a chasquidos se despierta, y a segundos echa de menos siquiera su lamento.

________________________________F5

Me arreglo la vida a palos, a siniestros turbulentos.
Y si miro en el pasado casi presente,
puedo ver que aquí se acaban los infinitos.
Y el drama es la vida corta, la pesadilla, y el alcohol mal avenido.

De la misma forma no contemplo dicha alguna,
persiguiendo olisqueos de perro.
Mejor nos olvidamos de las reacciones en bucle,
certificadas asesinas, de predecibles y aburridas.
Reservo la tristeza para ocasiones más importantes.
Y aun maravillada de su desfachatez e incongruencia.
Le invito a la ausencia, al infierno y al carajo.

Muchas gracias.

[]

Como nunca hay luego, los sies y noes quedaron en grises.
Habrá que resignarse al presente espacio tiempo,
al continuo sombra en duda. A la mala praxis del infinito.


Y sin razón digo que seré feliz así me aspen,
el gusano saluda al final del agujero volviendo fugaz lo que toca.
Invitarle a jugar será entonces lo más sano.
Y sin mucha gana aceptaré el destino, y con algo de fortuna lo olvidaré antes de que ocurra.
Y me haré la sorprendida como si nadie lo hubiera nombrado antes.
Le preguntaré su nombre. Me mostraré encantada.

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Premonizo accidente de personalidad,
Yo versus mirada al suelo. Respiro, total, es mejor.
Hipnopédiame, sabes que será más fácil.
Pasando por el laberinto y contra la pared de marras,
de amarras.
Qué pegajosa, y qué excéntrica esta retroalimentación hipnotizadora.
Tanto hablar a través de este muro de distorsión en delay,
y se me han hecho cortos los espacios.
Lánzame que los vacíos son conocidos,
pero dejame limpiar el desastre y las complicaciones.
Espera, preparo dosis de sentimientos contenidos,
no cantes gritos, no calles ni otorgues.
Preocupa a lo necesario,
insubordinación que dan las 12.
Después de siete años
son buenos tiempos, qué puedo decir.
Afortunados de que la gravedad te atrape,
déjame tranquila con mis buenas horas.
Si disfruto de esto, no te asustes,
es salvia familiar, enraizada hace ya 26.
H2O versus antrax, ya sabemos quién es qué
No gastes, la plegaría es para Marías.
Pero dejemoslo claro
La soledad no es blanca.
Mantiene sus caras B en las líneas
marcadas de la terrible compañía.

_________________Instrucciones para hacer una maleta

Misterioso el bicho,
acuérdese de quemar el recuerdo,
no lleve objeto que pueda insinuar vuelta.
Embale en la caja la conjetura, la medida, lo pesado y lo fugaz.
Recuerde esas cosas pequeñas que deformaron el cuadro.
No olvide oscurecer lo que pueda florecer dejando a cuestas el tiesto.
Asegúrese de que las palabras han callado.
El resto enciérrelo en este cajón.
Su pasado es lejano, y su futuro aún no es.
El presente no es clasificable, usted así lo espera.
Y ahora escúcheme bien:
CORRA

______________________________________Ud.

Y usted que va de bodorrios,
que de zorros se engalana, pero que zorra no le digan.
Que se mantiene las noches oscuras, peinándose en vela,
rebañanadose en la conciencia resuelta del día.
Cual porca putana, golosa de chandal,
tacones de cuña, tocino de cerdo.
Que el viento enarbole tus rizos,
enmude tus burlas, mal te haga callar escupiéndote fuego.
Mil colores a risas, mil sabores podridos, mil cerezos caídos,
mil tormentas remotas.
Así se te hagan las manos agua, la boca lodo, el diente amargo.

A usted, la que todo lo maldice.

_*_*_

La banalidad, divina presencia, tu que todo lo que tocas, que todo lo cueces. Y luego se olvida, y nada paso. Y no se tiene presente a claras, y el pasado dura un día. De lo que se dijo la banalidad no se acuerda. Coleccionista de sonrisas, ajetreada y sin permanecer. Así parece que es, no juega si no es divertido. Astuta camuflada, evidente y horrenda, efímera, avara, sometida al sarao y al postín.